Mineápolis, una ciudad conocida por su vanguardia industrial, su cadena de lagos y ser el lugar de nacimiento de la estrella del rhythm and blues Prince, ofrece todavía mucho más durante la época estival. La amplia variedad de actividades culturales que se celebran pone a su disposición numerosas propuestas, tanto si se queda una semana como si planea una escapada breve.
La feria por excelencia
La Feria del estado de Minnesota, la más grande de EE. UU. en cuanto al número de asistentes, le permitirá recorrer cientos de puestos de delicias locales, esculturas de mantequilla (como lo lee), actuaciones de música en directo y una noria gigante. El año pasado, la feria batió el récord de visitas durante la inauguración y todo apunta a que este año (del 22 de agosto al 2 de septiembre) irá igual de bien.
Red, White & BOOM!
Cada 4 de julio, más de 75 000 personas se reúnen en el malecón del centro de Mineápolis para disfrutar del espectáculo de fuegos artificiales. Sin embargo, la celebración del Día de la Independencia de Mineápolis —Red, White & BOOM!— abarca mucho más que la noche: empieza con un maratón a las 6:00, seguido de potente música en directo y actividades familiares. A las 22:00, unos fuegos artificiales espectaculares sirven para clausurar el evento.
Prince estaría orgulloso
Una visita a Mineápolis no está completa sin saborear su escena musical. Escuche al quinteto de indie rock The National en el festival Rock the Garden el 29 de junio; a Jason Mraz, CHVRCHES y muchos más en la 25.ª edición del festival Basilica Block Party, del 12 al 13 de julio, y disfrute de una serie de conciertos y muestras de cine gratuitos en Music in the Parks, que se celebra dos noches al mes durante junio y agosto.
Joyas del centro
El Teatro Guthrie, predilecto entre los habitantes de la ciudad, ofrece algunas de las mejores producciones del Medio Oeste. Fundado por un director teatral británico en 1963, el recinto ha pasado de ser sede de la compañía teatral residente a convertirse en todo un emblema cultural: su llamado Puente Infinito, un “lobby” que se extiende sobre el Misisipi, ofrece unas espectaculares vistas en 180 grados de la ciudad. La noche de micrófono abierto para todo el mundo de los lunes ofrece un acompañamiento ideal para cenar en uno de los impresionantes restaurantes del teatro. Hospédese en el elegante Radisson Blu Minneapolis Downtown y dé un relajante paseo de regreso al hotel por las Ciudades Gemelas.
Maravillas acuáticas
Las cataratas Minnehaha, uno de los lugares más “instagrameables” de Minnesota, impresionan todo el año, pero en primavera y verano adquieren una belleza especial. A solo 15 minutos en coche del centro, podrá contemplar unas impresionantes cataratas de 53 pies rodeadas de la zona silvestre inmaculada del gran parque. Robles, olmos y arces se alzan entre flores autóctonas que harán que se sienta aún mucho más lejos de la ciudad.
Huya del calor
El megacentro comercial Mall of America es mucho más que un lugar para ir de compras. Traiga calzado cómodo y planee una escapada al barrio de Bloomington, en Mineápolis, a solo 10 minutos del aeropuerto. Además de las tiendas y zonas de comidas, las familias disponen de otras muchas opciones: el acuario más grande del mundo, un minigolf y un parque de atracciones. Disfrute de acceso directo desde el Radisson Blu Mall of America, un hotel galardonado que cuenta con spa, piscina de agua salada y un servicio de traslado al aeropuerto de cortesía.
Doblemente orgullosos
No se pierda el evento más animado del año: el Twin Cities Pride, que celebra el día del orgullo LGBTQ+ a la americana. Es un evento tan excepcional que tiene lugar durante dos días, del 22 al 23 de junio. Gente de todo el mundo se reúne para celebrar el espíritu del orgullo en las Ciudades Gemelas. El recinto, situado en el Loring Park, está abarrotado de stands de expositores, puestos de comida y cuatro escenarios de música y representaciones varias. Es la cita ineludible del año y, lo mejor de todo, ¡totalmente gratuita!